CASEDA-2023-02-26

El frio de la mañana se nos ha metido en los huesos mientras comenzamos el camino. El viento nos encoje, nos concentra en la marcha para sentir el calor de nuestro propio cuerpo.

Este invierno se resiste a desaparecer, aunque ya van brotando algunas flores en los almendros.

Poco a poco dejamos el pueblo y nos adentramos en los caminos que nos conducen a las cimas del día. Apenas paramos, unas fotos para documentar  que estuvimos ahí y de nuevo en marcha. Un pequeño refugio entre los árboles para el refrigerio y de nuevo al recorrido.

Hay días que caminar es más importante que hacia dónde. Caminar para sacar el frio, para elevar la temperatura, para terminar el recorrido y recogerse en la calidez del autobús.

Pero hoy no toca al final el recogimiento. Hoy, a la orilla del rio, con un viento helado, nos hemos hermanado con un refrigerio, y hemos brindado por la salud y felicidad de unas compañeras. La temperatura ha sido muy fría, pero el ambiente ha sido muy cálido. Esperemos que la próxima podamos vivir también el calorcito del día

LONGAS-2023-02-19

Perdido entre carreteras imposibles, hemos encontrado el punto de salida de nuestra marcha. Lo que no hemos disfrutado llegando lo hemos disfrutado andando. Alguno ya habíamos recorrido estas tierras hace algún año, y no nos han defraudado. Son paisajes para disfrutar subiendo y bajando, sintiendo en rio a cada paso mientras oyes el sonido de su caudal, de sus pequeñas cascadas y observas su color característico.

Y una vez sales de la maraña de árboles y arbustos que circundan el rio, cuando llegas a la ermita y subes a las cimas que la custodian, el paisaje se ensancha, se hace horizonte conocido dibujando los pirineos  a golpe de objetivo. Porque no se puede uno marchar sin obtener una visión panorámica tanto a través de los ojos, como encerrada en el sensor fotográfico

Terminar un día sin una comida en el propio pueblo habría sido una ofensa al paisaje y al paisanaje. Por ello, así lo terminamos, disfrutando igualmente de las viandas servidas.

VENTA LARRION-M.IRANZU-2023-02-05

Si no fuera por el frio que penetra tras las ráfagas vespertinas, se diría que estamos casi en primavera. La luz va irrumpiendo y se abalanza sobre nosotros cada mañana con más prontitud. Poco a poco los campos se pueblan de verdor y algunos árboles se desperezan  la cruda estación

Pero este tiempo tiene dos caras, como los montes. Y si te adentras a la cara oscura, vuelves a ver el invierno en toda su crudeza. Nieves que permanecen ancladas al terreno, formando en los refugios más sombríos grandes placas de hielo que impiden una marcha despreocupada.

Aunque también nos agrada, nos desvela, nos pone en guardia y nos procura nuevos retos. Sentir en un corto espacio la emoción de que estamos lejos, rodeados por un clima inhóspito, para en unos pocos cientos de metros, volver a vivir la alucinación de la primavera sobre el rostro, cerca ya de nuestro destino, y pensando en redondear el día con una cervecita acodado en la barra, mientras se hace la hora del regreso.